Soy una mujer de 47 años y mi vida ha transcurrido muy pasivamente, no voy a detallar mi estado civil porque aquello es otro tema. Comencé a vivir no hace más de 7 años cuando desperté ante mi realidad y me di cuenta que me urgía un cambio de vida, no sólo porque ya el pasar de los años comienza a notarse sino porque solo tenemos una oportunidad y no vale la pena no haberla vivido, pero para ello debía encontrar una Pasión, algo por lo cual me inspire, algo que me haga soñar y sobre todo me ilusione… algo que me haga sentir lo que los campeones sienten, algo que me haga saber por qué los deportistas pasan horas y horas entrenando… algo que me haga saber que yo también puedo….
Fue así que comencé a experimentar y probar cosas que nunca las hice, fue anecdótico cuando sin haber participado nunca en ninguna competencia me inscribí en un Duatlón, por lo poco que sabía del tema busque a una compañera que me acompañe en esta aventura y que también no haya incursionado en este ámbito y así mi culpa de posiblemente llegar al último iba a ser menos traumática. Mi mente no estaba programada en cuanto tenía que pedalear sino en sentir esa adrenalina que tanto anhelaba y que podía llamarse Pasión.
Sin duda llegue última, mejor dicho llegamos ultimas porque era 17 km en bicicleta y 7 corriendo….” La modelo“ nos esperó hasta poner sus dos últimas medallas. Fue gracioso para mí (no para mi amiga) llegar y no ver a nadie en el lugar. Hasta una medalla extra me dieron por ser la única mujer en mi categoría…
Así fue como comencé y con mi antecedente atlético (sentido sarcástico) me invitaron a inscribirme en una nueva competencia y esta vez era unas 10K y dije… bueno vamos a ver si aquí si encuentro lo que busco, y lo hice nuevamente, esta vez no llegue ultima, pero tampoco primera, pero eso no importaba, el objetivo era cruzar la meta y saber si llegando me esperaba con los brazos abiertos mi anhelada Pasión. En el transcurso de esas 2 horas vi cómo la gente disfrutaba y como los aplausos de los espectadores nos daban ánimo para seguir. Me inspiro todo tipo de gente: niños, adultos, todo tipo de mujeres: gordas, flacas, altas, bajas, esculturales etc, todas ellas desbordaban alegría , pero lo que más me inspiro y me deleite sobre todo fue cuando hubo un tramo que delante mío había una persona joven discapacitada que corría a su ritmo pero su corazón iba mil por hora ( lo podía sentir, por su agitada respiración ) sus ganas, su entusiasmo, su alegría era muy notorio no solo para mi sino para las miles de personas que le aplaudían… vi en Él la Pasión que yo tanto anhelaba y en ese cansancio alce a ver al cielo y me dije “ Gracias”.
Esta experiencia lo hice por 2 ocasiones y me gusto, como decimos en mi país “me enganche”, así fue que desde ese día he participado en varias competencias, no menos de 10K, inclusive en mi último viaje a Buenos Aires me inscribe en una carrera “ No podía creerlo” Yo corriendo por Puerto Madero. ….
Pero como mujer llegue a experimentar lo que busque por mucho tiempo, el tener esa ilusión de hacer algo que me gusta, no sé si esta va a ser mi verdadera Pasión, pero sí sé que tampoco va a ser la única, esta sensación quiero tenerla siempre, es la que me hace vivir, es la que me hace sentir, es una fuerza motor.
Les invito a buscar su Pasión, no importa en qué ámbito, lo importante es encontrarlo, tampoco importa la edad, lo importante es vivirlo y experimentar cosas que jamás lo hicieron, ese es el Kit de la Vida.